16 de septiembre de 2007

Un pequeño acercamiento al retrato

Y ahora la fotografía más grande de esta niña que jugaba con su barco en el Jardin du Luxembourg.
Dicen de este lugar, y doy fe, que su magia es irresistible, si se considera que poetas tan desdichados como Baudelaire y Verlaine se lo pasaron bien aquí.
Y es allí, donde uno puede sentarse para disfrutar de una tranquila lectura, rodeado de un escenario que ha sido testigo de algunos de los pensamientos que han quedado plasmados en nuestros libros.

3 comentarios:

  1. Qué bueno encontrarte de nuevo por aquí y sobre todo parece que con ánimos renovados.
    1 biko.

    Me ha gustado ver de nuevo esta fotos y el comentario.

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  2. La foto es cojonudísima, no me canso de repetirlo.

    Ahora, eso de que Verlaine se lo pasaba bien en el parque...si viviese Verlaine lo más probable es que sodomizase a la niña del barquito y luego se metiera un chute del primer matarratas que pillara.

    Baudelaire buscaría una puta negra a la que llorarle en el pecho su desgracia.

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  3. Podríamos decir que cada uno busca la felicidad como puede, como quiere a veces...Hay quien enjugando sus lágrimas entre los pechos turgentes de una prostituta encuentra algo de dicha en su vida, hay quien necesita el drama para encontrar un sentido a su existencia, hay de todo en la viña, Mendiguiño...

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