Iñaki Gabilondo me gustaba cuando (yo) era (más) joven. Afable, inocente, limpio de toda política y comprometido con aquello que concedía seguridad y bien a TODOS los ciudadanos. Ahora lo escucho y me doy cuenta de lo equivocada que estaba yo, o mucho he cambiado desde entonces, o mucho ha cambiado él.
El paso del tiempo va acercándonos a nuestro "yo" más profundo. Lástima tener que desaparecer tan pronto y morir sin apenas habernos conocido.
Dejo aquí un trocito de lo que he leído sobre una entrevista que le hicieron. Quizá, como casi todo en estas redes, esté "retocado" también de alguna manera. Leamos, por si las moscas, con cierta distancia.
Iñaki se moja y opina sobre los comunicadores de éxito
Una de las partes interesantes de la entrevista con Iñaki Gabilondo
es su valoración de algunos de los comunicadores de televisión que
arrasan en audiencias y que comparten libro con él.
Sobre Ana Pastor: “Creo que hace un periodismo de primera categoría.
Esa técnica que emplea de repregunta, que ella dice que aprendió de mí,
me gusta, me parece muy buena… Ana tiene un único problema y es que es
una mujer joven. Y ese es un problema muy serio. Porque la entrevista es
observada por el espectador también de otra manera en función de la
propia edad y del peso específico que tiene el entrevistador. El
presidente del Ecuador le dijo un día “Anita” por ser mujer, y a mí no
me habría dicho nunca”Iñakito”. (…) Cuando tenga 58 años no pasará por
impertinente sino por ser personalidad acrisolada; ahora sus detractores
la consideran una cría.
Sobre Jordi Évole: “Jordi es como el enviado especial de la
ciudadanía a los temas de actualidad, es como si en vez de ser un
periodista o un profesional, el pueblo, la gente le hubiera dicho:
“Pepe, venga tú…”. Comisionado, enviado especial de la cuadrilla del
bar… como un corresponsal. Lo cual es muy bonito. En segundo lugar hay
que decir que el trabajo de Jordi Évole tiene una preparación
extraordinaria que la gente no ve. (…) Es un trabajo documentado, con un
equipo formidable…”
Sobre García Ferreras: “Tiene un interés extraordinario en que se
entiendan las cosas bien. (…) Es un hombre muy escrupuloso,
periodísticamente muy meticuloso. Un excelente periodista. Y tiene mucho
interés en que queden muy claras las cosas, en que no haya lugar a
equívocos.
Sobre Wyoming: “Es único. “El intermedio” es un formato teóricamente
muy sencillo, que se le puede ocurrir a cualquiera. Lo que no se le
puede ocurrir a cualquiera es tener a Wyoming o al equipo con el
director que tiene, o al equipo con sus guionistas. Eso es lo difícil.
En la comunicación juega mucho el factor humano. Es una personalidad y
no puedes inventártela. Wyoming no es un cachondo al uso.