20 de diciembre de 2007

El consumismo que nos consume...

Desde luego, el mayor regalo se lo llevan los grandes Centros Comerciales; ésos que se preocuparon de recordarnos a principios de noviembre que llegaba la Navidad y que había que comprar regalos porque sí...
Con lo que compra el abuelo, el primo, la amiga de mamá, el vecino, los papás y el hermanito mayor, los niños perderán esa ilusión que aun sentíamos nosotros cuando venían los Reyes...

Y es que todo en exceso...
:(

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y que pasa con los que odiamos los centros comerciales, como yo, sólo entrar en ellos hace que me sienta mal que respire mal ,me salen ronchas en la piel...estresa,hay un ruido insoportable,toda la gente agolpada en un espacio reducido..es como una pesadilla

Campu dijo...

Pues lo mismo que a mi...empieza a bajarme la tensión, mi cuerpo comienza a sudar, a vibrar... los empujones, las avalanchas, el calor, el gastar y gastar sin saber qué comprar...
Especialmente durante estas fechas son insoportables.
El resto del año también... Nunca me han gustado nada de nada, aunque no niego que voy, cuando ya no me queda más remedio, porque es más cómodo y más rápido que recorrerse tiendas y tiendas...
Prefiero un paseo al lado del mar, los espacios abiertos y la luz natural...
Excepción: alguna que otra cervecería oscura y tentadora.
:)