13 de julio de 2010

EL MAR: hay vida después del fútbol...








NECESITO del mar porque me enseña:
no sé si aprendo música o conciencia:
no sé si es ola sola o ser profundo
o sólo ronca voz o deslumbrante
suposición de peces y navíos.
El hecho es que hasta cuando estoy dormido
de algún modo magnético circulo
en la universidad del oleaje.
No son sólo las conchas trituradas
como si algún planeta tembloroso
participara paulatina muerte,
no, del fragmento reconstruyo el día,
de una racha de sal la estalactita
y de una cucharada el dios inmenso.

Lo que antes me enseñó lo guardo! Es aire,
incesante viento, agua y arena.

Parece poco para el hombre joven
que aquí llegó a vivir con sus incendios,
y sin embargo el pulso que subía
y bajaba a su abismo,
el frío del azul que crepitaba,
el desmoronamiento de la estrella,
el tierno desplegarse de la ola
despilfarrando nieve con la espuma,
el poder quieto, allí, determinado
como un trono de piedra en lo profundo,
substituyó el recinto en que crecían
tristeza terca, amontonando olvido,
y cambió bruscamente mi existencia:
di mi adhesión al puro movimiento.

5 comentarios:

  1. Que grande Pablo Neruda, que gusto da leer algo así despues de pasearte por los blogs y no ver mas que futbol y mas futbol...

    un saludo

    ResponderEliminar
  2. por cierto, gran error no comentar las fotos, sobre todo la primera, me encanta, si las has hecho tú, tienes muy buen ojo :)

    ResponderEliminar
  3. Magníficas tomas,con unos tratamientos tonales excelentes,buen trabajo.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  4. El trabajo por fin me da un respiro, querido amigo. He vuelto. Espero ponerme pronto al dia con tus posts.

    Un abrazo...!

    ResponderEliminar
  5. Neko, muchas gracias por tus palabras y adoro a Pablo Neruda. Me encanta el comienzo de estos versos que no conocía...

    Cascarilleiro, las tuyas sí que son magníficas. Vuelvo a los lugares conocidos con tu blog. Me encanta.

    Cornelivs, ven cuando quieras, cuando puedas...aprovecha el verano.

    ResponderEliminar

He tenido que habilitar de nuevo la moderación de comentarios. En este blog se admiten todo tipo de opiniones pero con argumentos y con respeto hacia las demás. El insulto y las malas formas no caben en este lugar. Si entras aquí con esas intenciones, no serás bienvenido.
Los anónimos han venido en forma de spam solamente, durante estos últimos meses. Me veo obligada, por lo tanto, a bloquearlos.
Siento que tenga que ser así.
Gracias.