Empiezo a sentir unas tremendas ganas de perderme de nuevo entre las hojas secas, entre los caminos de Galicia, del resto de España....al final de los pasos que los forman aparecen piedras sorprendentemente colocadas. Al final siempre merece la pena echar la vista atrás, mirar hacia delante...jugar con las sombras, con los sonidos de una naturaleza que se encuentra más viva que nunca bajo los pies de un peregrino que peregrina hacia ninguna parte, hacia todas las partes...sin rumbo o con él...
Espero poder empezar a reinventarlo pronto otra vez.
Vi hace unas semanas la película....The Way....no es nada de otro mundo porque no explota a los personajes y sus relaciones como debiera (y dan para muchísimo las relaciones peregrinas que se tejen bajo esta experiencia única)...
Aun así, me trajo bonitos recuerdos y, como siempre, añadiré una puntualización que me pareció curiosa, triste quizá...se nota quién aportó dinero de verdad...Galicia es una simple anécdota de la historia....(increíble y cierto)...
Es magnífica esta fotografía que subes, ilustra bien la esencia del Camino por tierras gallegas. Yo también guardo muchos y muy buenos recuerdos del Camino, lo hice ya hace tiempo, en dos ocasiones y por partes. Toda una experiencia.
ResponderEliminarUn abrazo
· Llamar The Way al Camino es un poco...
pero bueno, algunas veces, a extranjeros, les digo que hacemos The Milky Way
· bicos y ¡a empezar otra vez!
Espero estar en él a mediados de Mayo.
CR & LMA
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Ángel, si tienes oportunidad no dejes de hacerlo nunca...lo importante es caminar, sentir el aire de la temprana mañana en la cara...me encanta esa sensación.
ResponderEliminarÑoco, the Milky Way...pues sí...algo así...
Lo cierto es que the Way no me gusta nada a mí tampoco.
Yo también espero estar caminando pronto. Quizá coincidamos.
Felices caminos, navegantes.