10 de noviembre de 2013

¿En qué se diferencian Letizia y "La Esteban"?


Lo digo en serio. ¿En qué se diferencian?
¿En qué se diferencia la ignorancia de los que nos "dirigen" de la ignorancia de los que se desnudan frente a la pantalla para ganar pasta "fácil"?

La gente se extrañaba de los resultados conseguidos por Carmen de Mairena en su día.
¿Qué diferencia hay?
Yo no veo ninguna.

Como podemos ver, cada día se acercan más y cada día nosotros nos alejamos aún más de ellos.
¡Qué tristeza de sociedad empobrecida!

5 comentarios:

Douce dijo...

Campu,

No siento tanto por una y por otra, a las que no juzgo, sino que este 'encuentro' figure entre las primeras noticias de la prensa digital.

Creo que es una muestra triste del mundo en que vivimos.

Feliz semana, hay que aprovecharla.

Ripley dijo...

pues mayormente en que son dos especies diferentes de homínidos. cosa que no ocurre como dice Douce con los periodistas.

besos

Sergio DS dijo...

Peeeeeeena, peniiiiiitaaaaa, penaaaaaaaaaaaa, penaaaaaaaaa... (y tal).

Jota Ele dijo...

Dada mi habitual cortedad, me temo que no he comprendido bien tu entrada. Sé que algo quieres decir, pero no lo pillo.

Yo creo que las diferencias son evidentes. No hay más que ver y escuchar durante muy pocos segundos para comprender esas diferencias tan evidentes.

Otra cuestión, (no sé si van por ahí tus "tiros"), sería indagar cómo es posible que dos personas tan diferentes en todo pueden confluir en un mismo lugar y que, incluso, se hablen.

Si estoy en lo cierto, es una prueba evidente más que algo muy malo pasa en nuestra sociedad.

Besos.

Campurriana Campu dijo...

Jota Ele, principalmente me da pánico este acercamiento entre unos y otros mundos.
He utilizado como representantAs de estos mundos a Letizia y Belén. Podrían haber sido otros "personajes" también. Me daba igual...

Por otro lado, aunque claro que hay diferencias evidentes entre ambas, no creo que sean tan evidentes entre esos mundos que cada día se acercan más porque los placeres gustan a todos y la vida se ha convertido en la búsqueda del placer a corto plazo y a toda costa.

Es una desgracia para todos nosotros. Quizá antes ocurría lo mismo pero se tapaba más. No digo que no aunque creo que todo transcurría de otras formas, al menos en ciertos ámbitos. Hemos perdido la paciencia, la tranquilidad, la sencillez de las cosas que son sencillas...

A Letizia no la admiro por nada, la verdad. ¿Es diferente a Isabel Preysler? ¿y quién es Isabel Preysler?...¿y los encorbatados que se disfrazan con trajes para tapar debilidades?...

Bufff...no sé si me estoy explicando.

No han hecho nada bueno los de ahí arriba y, es cierto, los de aquí abajo tampoco merecemos aplausos en muchos aspectos. Pero da qué pensar todo esto. Y es muy triste.