13 de mayo de 2022

Empiezan los días claros

Empiezan los días claros. Los días de un verano que ya no va a tener la misma luz que recordaba hasta ahora. Otro color. Otros sentimientos. Otras sensaciones físicas. Temblores. Ojos tristes. Y, de repente, una alegría tímida que asoma. Una nueva esperanza por lo que vendrá. No es la juventud lo que viene, sino la madurez más profunda, más hermosa y, a su vez, más inmensamente melancólica. 

Hay belleza en todo esto. No me atrevo a mostrarme atrevida con la alegría porque últimamente me da en la cara, como ráfaga de realidad aterrizada.

Sigo seca. Ni una lágrima. Ni un grito. Todo dentro aún. He reído más que he llorado durante todo este tiempo. Porque no he llorado nada. 

Continúo subiendo y bajando. Aprendiendo. Todo lo que llevas detrás lo has vivido. Es tuyo. Es tu aprendizaje, tu experiencia. A veces, me siento más inexperta que cuando era adolescente. Quizá no sea eso pero así me siento. Más adelante, floreceremos con hojas ya secas. Incrustadas para siempre en los tallos de nuestra existencia.

He empezado a escribir. Sin imágenes. Sin colores. Sólo la pantalla en blanco que simboliza el futuro que tenemos todos por delante. Blanco aunque parezca negro. Es blanco siempre. No lo olvidemos nunca. 

5 comentarios:

Alfred dijo...

Las hojas esperan a ser rellenadas, los pensamientos fluyen, las sensaciones vienen y se van, algunas quedan y nos siguen impulsando.
Hay que vivir cada etapa, aunque sea la última.
Un abrazo.

Campurriana dijo...

Hay que vivir cada etapa, aunque sea la última.

Me quedo con eso, Alfred. Espero que nos queden algunas más. También lo añado.
;)

Un abrazo en estos días que prometen lluvia. Al menos, por este terruño.

TORO SALVAJE dijo...

Hola Campurriana.
Te noto como si tuvieras el alma temblorosa.
No me atrevo a darte consejos, para mí los quisiera... pero sí darte ánimos para que transites lo mejor que puedas por esa madurez melancólica de la que hablas.

Justiniano me dice que te dé un abrazo... bueno, pues uno de Justiniano y otro mío... que vienen a ser dos abrazos igual de cariñosos.

Y un beso.

Campurriana dijo...

Toro Salvaje, agradezco tanto ahora los abrazos. Bueno, siempre. Pero con estos tiempos de pandemias varias, nos hace falta piel y más piel.

Alma temblorosa, puede ser. También más conocedora de la vida. De lo que ella significa. De lo importante. Vivir es urgente. ¿Era de Pau esta frase? Luego lo miro.

Un abrazo para ambos. Justiniano es una de mis debilidades. Lo sabes.
:)

Campurriana dijo...

Sí. La frase es de Pau Donés.
Un abrazo también para él. Allá donde esté.