27 de abril de 2007

Simplemente, Norma Jean...

Su imagen es uno de los reflejos de la sensualidad femenina, y quizá más en esos momentos en los que el cuerpo se muestra natural... sin corsés, sin cámaras, sin focos, sin ese mundo que llegó a ser demasiado grande para ella, y demasiado feroz...

Tras su muerte se apuntaba lo siguiente:

"No puedo decir adiós a Marilyn. Nunca le gustaba decir adiós. Pero adoptando su particular manera de cambiar las cosas, para así poder enfrentarse a la realidad, diré "hasta la vista". Porque todos visitaremos algún día el país hacia donde ella ha partido."

1 comentario:

Raíña Loba dijo...

Que se convirtiera en un mito, hizo que se olvidara que era un ser humano, frágil y perecedero.