10 de mayo de 2007

Amores de barra

Siempre me ha sorprendido la rapidez con la que dos cuerpos totalmente desconocidos pueden llegar a unirse, e incluso a sentir calor...

Iba a pedir a los lectores que nos hiciesen partícipes de alguna de esas aventuras nocturnas, en las que las luces de los focos a veces llegan a ocultar los defectos del amante y amado fugaz...

2 comentarios:

  1. Recuerdo un beso dulce y profundo, robado en una calleja a oscuras, en la fiesta de mi pueblo.
    Tenía unos envidiables 18 añitos...

    ResponderEliminar
  2. Raiña, me ha gustado la expresión de "beso robado"...

    :)

    ResponderEliminar

He tenido que habilitar de nuevo la moderación de comentarios. En este blog se admiten todo tipo de opiniones pero con argumentos y con respeto hacia las demás. El insulto y las malas formas no caben en este lugar. Si entras aquí con esas intenciones, no serás bienvenido.
Los anónimos han venido en forma de spam solamente, durante estos últimos meses. Me veo obligada, por lo tanto, a bloquearlos.
Siento que tenga que ser así.
Gracias.