Suenan tambores de guerra en Turquía, pero esta vez las balas vienen en forma de palabras y nada tienen que ver ni con el Ejército ni con los kurdos. Son las mujeres quienes tocan a rebato.
La Constitución vigente no deja margen para la duda: "Todas las personas son iguales ante la ley, con independencia de su lengua, raza, color, sexo, opiniones políticas y creencias filosóficas, religión o secta"
El borrador de la nueva norma introduce muchas dudas: "Las medidas que se emprendan para grupos que requieren protección especial, como mujeres, niños, ancianos y discapacitados, no deben interpretarse como contrarias a la igualdad"
Fragmentos del artículo de elpais.com "Las feministas turcas se movilizan contra la nueva Constitución al no garantizar la igualdad"
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