Nunca me suelo detener en este tipo de espectáculos callejeros. No sé por qué pero no me atraen demasiado. En este caso, sí que me detuve a observar, y no por el número en cuestión que dirigía este hombre delgado, sino por la chica que salió como voluntaria para participar en él. Tenía atractivo para la fotografía, o eso me pareció a mí al verla en la plaza Dam de Amsterdam tan resuelta. Cuando descubrí las imágenes en casa supe que no me había equivocado. Respecto al espectáculo en cuestión, aún a día de hoy no sé qué sentido tenía. No tuve paciencia para terminar de verlo.
21 de septiembre de 2010
5 comentarios:
He tenido que habilitar de nuevo la moderación de comentarios. En este blog se admiten todo tipo de opiniones pero con argumentos y con respeto hacia las demás. El insulto y las malas formas no caben en este lugar. Si entras aquí con esas intenciones, no serás bienvenido.
Los anónimos han venido en forma de spam solamente, durante estos últimos meses. Me veo obligada, por lo tanto, a bloquearlos.
Siento que tenga que ser así.
Gracias.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
pues yo siempre me paro, no puedo evitarlo, me atraen como la luz a las polillas
ResponderEliminarA mi tampoco me atraen mucho la verdad. Ciertamente la chica tiene encanto para la fotografía
ResponderEliminarLa vida está hecha de momentos...
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo que más me ha llamado la atención es comprobar que este tipo de espectáculos atrae a la gente en todos los países. Echo de menos a más chavales. A lo mejor era hora de colegio. Sólo veo a un niño, que por cierto no parece muy holandés.
ResponderEliminarCosas del Náufrago. Cuando era más pequeño, hace muchíiiiiisimo tiempo, se olvidaba de los recados que le encargaban y se pasaba las horas muertas viendo y oyendo a los "Charlatanes' de la época vendiendo 'crecepelos' y productos milagrosos...
Algo de eso le queda todavía, pero menos.
Amio, soy conocedora de tus gustos por este tipo de espectáculos. Incluso sé que alguna vez has salido como voluntario...
ResponderEliminarAna, quizá tengan algo que no veamos. A mí a veces hasta me provocan una cierta tristeza. No sé cómo explicarlo...
Cornelivs, éste es uno más de esos momentos de viaje.
Náufrago, también sale una niña que muy holandesa no parece tampoco. Es curioso observar la cara de ese público. Yo también lo suelo hacer...me fijo mucho en los secundarios y "terciarios" de las películas...