

Ocurrió durante uno de mis paseos por esa sierra que acoge y estremece a veces. Iba sola y creía que estaba sola. De repente, escuché un ruido y la vi pasar a mi lado. Por un instante, pensé que ella estaba pensando lo mismo que yo en ese preciso momento.
Haberle pedido el teléfono.
ResponderEliminarMe gusta.
Besos.
Llegaba tarde al autobús.
ResponderEliminarSolitaria por el campo paseaba sus pensamientos...
ResponderEliminarSalu2
Una y otra invadiéndoos el terreno:)
ResponderEliminarY rompiendo soledades.
Saludos
La historia es totalmente verídica. Me asustó esta aparición lateral...
ResponderEliminar:)
Eso te pasa por lo que te pasa...
ResponderEliminarEstas no hacen daño,los de dos patas y bicicletas,a veces si.