13 de junio de 2012

Un documental que merece la pena ver: "Rusia a dos revoluciones"

Una petición estimulante

El pasado septiembre, la dirección de informativos de TVE me encargó un reportaje para En Portada. Se trataba de continuar el trabajo que la también antigua corresponsal de TVE en la URSS, Llúcia Oliva, había realizado hace diez años. La petición era estimulante, hacer ahora un nuevo reportaje con una serie de personas que habíamos entrevistado en 1991 y en 2001. A través de ellos, explicaríamos los cambios en Rusia desde el 25 de diciembre de 1991 cuando desapareció la Unión Soviética.
La tarea más laboriosa consistió en rescatar a los personajes. Diez años después alguno había muerto y otros se habían hecho muy mayores o simplemente no querían participar en el programa. Pero la verdad es que la mayoría acogieron con entusiasmo nuestra propuesta.

Rusia, veinte años después

Después de veinte años, sí que he constatado un cambio en la actitud de la gente. Hoy son muy amables, casi no he escuchado aquella habitual expresión del “príncipie, niet” (de entrada, no) tan típica cuando pedías alguna cosa al final de la era soviética. Es algo que el visitante agradece.
He regresado de Rusia contento y preocupado. Es evidente que se vive mejor, pero también lo es que hay un regreso al pasado. La gente vuelve a desconfiar de las instituciones del estado, la corrupción domina la administración pública, los medios de comunicación están amordazados y la política está dominada por la antigua policía política soviética. Todos saben quién será el próximo presidente o primer ministro. El futuro político y económico está diseñado y a la mayoría de rusos les parece perfecto, de momento.
En estos veinte años, la vida ha mejorado, pero la democracia ha empeorado. En Rusia, hoy, la herencia de la Unión Soviética está presente.

2 comentarios:

Juan Nadie dijo...

Dudo que Rusia tenga algún día remedio. El tópico dice que el pueblo ruso siempre fue masoquista, y los tópicos desgraciadamente no suelen fallar.
Estuvo sojuzgada durante casi ochenta años por una despiadada y demencial dictadura comunista, y ahora los está por unas mafias que proceden del antiguo aparato soviético, de modo que ya me contarás.

Campurriana dijo...

Juan, desgraciadamente yo también pienso lo mismo. Estuve allí hace poco y pude ver la desigualdad tan grande que existe entre unos pocos y el resto. Allí la gran parte de la población "sobrevive". Moscú es carísimo para los sueldos y pensiones que tiene su población, y el inmenso campo que rodea a esta gran ciudad está olvidado...
No vi apenas sonrisas en Moscú y eso me hizo pensar.