18 de diciembre de 2015

Escribiendo...

Era el momento de los reproches. Inevitable en una pareja que se desvanecía lentamente entre los pasos de la vida. Ahora que las carnes no eran tan turgentes, había llegado el momento de la verdad. Demasiadas cosas les ataban, y otras tantas les separaban con la fuerza de una cuchilla sobre la nieve helada. Pura contradicción. Adolescencia incrustada en las duras arrugas que provoca la miseria humana o el placer instantáneo como ese dulzor de besos. -Todo se acaba-pensó con alivio. Este desasosiego desaparecerá para siempre y nada más.

3 comentarios:

Chaly Vera dijo...

En vez de seguir odiandose en secreto es mejor odiarse en pùblico y esto solo se consigue con la separacion.

Campurriana dijo...

Ayer estuve viendo Antes del anochecer. No es especialmente buena pero tiene algún diálogo interesante. Da en el clavo de la realidad de pareja en muchos momentos.

No vi las anteriores películas. Supongo que tocarán las otras fases de la vida en una relación.

Cuando el dolor supera al amor...supongo que la separación es la salida más adecuada...
Difícil momento. Muy difícil si se sigue amando.

Campurriana dijo...

Por cierto, Chaly, me ha encantado tu concepto...odiarse en público es mejor... :)