25 de mayo de 2016

Mi Galicia preferida...



Una Galicia que me sedujo desde que entré en ella y fui inmediatamente devorada por sus relieves. Me dejé atrapar por esos cañones del Sil, por esos viñedos que invitaban al paseo y al dulzor de las uvas. Me dejé querer como amada sin retorno, sin defensa... Totalmente entregada a ese rinconcito que es un rincón de dioses...
El recuerdo de esta Galicia sólo me provoca placer... Allí, no sé por qué extraño motivo, la mente se dispara y a una casi se le ocurre hablar con versos... Y con besos.

11 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Vuelve cuando puedas y que la vida te abrace con versos y besos.

Ánimo.

VENTANA DE FOTO dijo...

También sentí la fascinación por esas tierrae en mi visita de hace muchos años y que me gustaría de nuevo repetir...a ver si encuentro la ocasión apropiada.

Besos

María dijo...


Hola CAMPU! Compartimos tierra, admiración y cariño por ella y... me temo que también sentimientos tristes por haber perdido a seres queridos recientemente, eso me ha parecido entender en tus letras ( por eso me he acercado) a mi me tocó en carne y hueso, a ti por lo que leo, aquí, en este mundo virtual que en cuestión de afectos puede ser tan real e intenso como el de fuera .. solo quería darte un abrazo fuerte y ánimo, los estados emocionales son como las nubes de esta tierra preciosa Galicia, van y vienen .. es así inevitablemente, pero al final, tarde más o menos y por manido que sea, lo sabes .. siempre sale el sol.

Date tiempo, cuidare, descansa y disfruta de Galicia mientras sale tu sol. Saldrá, sin duda!

Muchos besos CAMPU ... y si tienes oportunidad, te ruego los hagas extensivos a JULIO y familia, me temo que mis comentarios allí no deben quedar escritos... y como sabes, ha bajado las persianas.

Miguel García dijo...

No puedo por menos que sonreír con retranca al leer tus palabras pues yo, a quien se supone que por nacimiento le corresponde ser un castellano viejo, llevo atrapado entre el azul y el verde de Galicia nada más y nada menos que cuarenta años. Nunca he sido capaz de irme del todo y no creo que ya nunca lo haga.
Un abrazo,

Campurriana dijo...

Toro, muchísimas gracias. El tiempo tiene ese efecto reparador pero...no repara del todo. Siempre queda un poso de tristeza que nos acompaña...un halo que, aunque sea apenas perceptible, se advierte si se observa con detenimiento, con sensibilidad.
Sé que a Ripley "sólo" lo conocía virtualmente pero me ha dolido en el alma su historia, su final. Quizá os parezca exagerada pero...son mis sentimientos verdaderos. Entiendo que muchas personas no los comprendan porque, para comprenderlos, hay que vivir este tipo de relaciones tan especiales.
Como todo en la vida...para entender algo realmente, hay que vivirlo en propias carnes.

Ventana de foto, yo he regresado siempre que he tenido oportunidad. Es esa otra Galicia más desconocida. Por falta de mar, no es menos Galicia.

María, tus cariños extensivos seguro que ya han llegado. De todas formas, lo comentaré también.
Me alegra mucho verte por aquí y te doy las gracias por estas palabras tan bonitas.
Los nubarrones van desapareciendo y ya aparece el sol por el rinconcito. Poco a poco... Eso sí: como le decía a Toro, siempre queda ese halo...ese misterio que nos acompaña...
Pienso en esta Galicia, por cierto. Pero la de las olas encabritadas que juegan con los muelles de los pueblos costeros del norte... Ay...¡cuánto me seduce también!

Miguel, yo tengo sangre gallega y castellana. ¡La mezcla perfecta!. Ya se te notaba a ti algo también... Sigue sonriendo... Siempre.

Jota Ele dijo...

Me ha dejado confuso esta entrada, Campu.

Así que, pido perdón por mi torpeza pero, ¿he de entender que ya no vives en Galicia? Ese "allí" me ha descolocado la verdad.

En cualquier caso, Galicia es todo eso que dices y mucho más.

¿No es en Galicia donde hay ese pulpo a feira y marisco del bueno?

¡Qué prosaico soy!

Total, que estoy hecho un lío.

Besos.

Campurriana dijo...

Jota Ele, sigo en Galicia. Pero hay muchas Galicias... En este caso, hablo de la Ribeira Sacra... Por eso lo de "allí"... Yo habito más cerca del mar...del marisco de mar. Luego, ya sabes, está "o marisco do cortello".
;)

esteban lob dijo...

Ay Campurriana, cuando más cerca estuve de Galicia fue en 1982, con motivo del Mundial de Fútbol que narré por radio para Chile desde Gijón y Oviedo, en el corazón de Asturias.Luego la proximidad humana, aunque a miles de kilómetros de distancia, la sentí y la siento por el contacto con tantos gallegos que viven en mi país.Todos muy humanos, alegres y querendones de su tierra, lo mismo que sus descendientes que son ya mis compatriotas.

Campurriana dijo...

Esteban, suena a experiencia deliciosa...
Yo tuve una camiseta de ese mundial. Recuerdo con cariño los tiempos en los que los futbolistas eran personas más de andar por casa. ¡Y con pelos!

XuanRata dijo...

Rincón de dioses, está muy bien definido, los monjes lo sabían, nunca se equivocan a la hora de levantar sus monasterios.

Campurriana dijo...

Xuan, una Galicia que, por diferente, me sorprendió.