3 de junio de 2016

Hablando de periodismo, hablando de desinformación...



Acabo de dejar este comentario en este enlace del blog de Enrique Dans: HABLANDO SOBRE INTERNET Y EL PERIODISMO EN EL CORREO GALLEGO. 
Y se habla de periodismo, de calidad informativa, del poder de internet y de las nuevas tecnologías, que ya no son tan nuevas, en esto de la información vs desinformación...



"No deja de tener gracia que sea El Correo Gallego el que haya realizado esta entrevista. Mucho tendrían que aprender ellos en este sentido. Su periodismo es tan poco periodismo, que he escuchado, en su propia ciudad, todo tipo de calificativos a la prensa que regalan cada día… Desde “tira cómica” hasta “El DOG 2” (Diario Oficial de Galicia), entre otros tantos…
“Si quieres ser feliz, lee El Correo Gallego”, he escuchado decir a algunos…
No sé qué ocurrirá en otros tiempos políticos pero, hoy por hoy, ya sabemos de qué viven.
Actualmente, me quedo con lo que ven mis ojitos. Y me fío más de los ciudadanos que están cerca de los problemas, de la noticia…que de los medios vendidos, flojos, poco trabajados, poco formados y poco informados. Incluso, con faltas de ortografía algunos y dudosa calidad de redacción.
Y ya no hablemos entonces del tipo de noticias que ocupan portadas hoy en día; desde la “celebrity” que enseña el trasero en la red social X hasta el suceso más escabroso que tiñe de sangre números y números de todos los diarios, pasando por el comentario fuera de tono de algún periodista o “periolisto” que necesita autopromoción porque se siente un tanto desplazado.
De hecho, he pasado de leer la prensa a leer blogs. Me ofrecen más fiabilidad, más confianza… Al menos, los que no son promocionados, ni patrocinados, ni utilizados como vehículo de nada…
Hay que saber seleccionar, por supuesto. De aquí, de allá, de acullá…
Eso siempre tendrá que ser así porque, intereses hay, hasta debajo de uno mismo.
“La información no existe”, me dijo una vez una periodista que acababa de caer del burro al ver el mundo en el que se había metido.
Sabiéndolo, al menos, uno lee con otra mirada y con otros criterios".



Tengo la impresión de que cada vez se exige menos en todo. La RAE admite palabras que no debiera admitir, por el mero hecho de que mucha gente las dice o aplica mal. A nivel educativo, los padres ponen el grito en el cielo por la cantidad de deberes que tienen sus hijos... Éstos son dos ejemplos. Seguro que se os ocurren unos cuantos más a cada uno de vosotros.

Todo en esta vida (lo que realmente merece la pena) debe implicar un esfuerzo: una lengua, un curso, un deporte, una profesión. Si implica un esfuerzo, sí que merecerá la pena. Si no lo implica, dejará de valorarse por este motivo, entre otros.

No os equivoquéis. No soy de ésas que está en contra de la evolución de la lengua, de la educación, de la tecnología... Eso no. ¡Eso nunca! Estoy a favor de ello si la calidad no se pierde por el camino. Si eso no sirve como excusa para no trabajar, para no hacer las cosas bien, para no cuidar los discursos, las palabras, las actitudes, las relaciones personales...

La información tiene que estar relatada por una persona que sepa de lo que habla. La información tiene que estar TRABAJADA, contrastada, verificada.
Hoy en día, mucha prensa "seria" es un mero transmisor de dimes y diretes de patio de vecinos y vecinas.
Sinceramente, ¿qué implica ser periodista? ¿eres periodista por tener la carrera de periodismo? ¿qué te ofrece esta carrera para diferenciarte de otro "contador de noticias"? ¿tendría que contar las noticias de economía un economista? ¿Y los juristas? ¿podrían contar ellos cómo ha ido el juicio del último corrupto de turno?...

No sé si me explico... 

8 comentarios:

esteban lob dijo...

Excelente Campurriana. Me parecía que hablabas de Chile.Entre otras similitudes, es la profusión de faltas de ortografía en televisión, al presentar los canales noticias, al pie de pantalla.

Chaly Vera dijo...

Jajaja, lo que dices es cierto.
A los estudiante no les enseñan a pensar y analizar, solo memorizar.
El periódico no funciona por miedo. Miedo al gobierno. Miedo a la Banca.
Y el periodista con miedo al dueño del medio.
Eso es sencillamente cierto.

Besos

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Sí y no. Cada vez se admite menos y todo vale para quienes, en realidad, no importan más que como consumidores. Cuando veo a alguien muy concienciado socialmente rebajar el nivel de exigencia propio o ajeno (en educación, en negocios, en cultura, en literatura), comprendo que ha renunciado a ser más que un consumidor.
En cambio, el nivel de exigencia para aquellos que manejan nuestro mundo de verdad, cada vez es más alto. Y no hablo de horas en el trabajo ni de trabajar por poco dinero. Sino del verdadero esfuerzo que lleva a pensar, ser crítico a partir de los conocimientos adquiridos, etc.
He ahí la verdadera brecha del futuro.

Campurriana dijo...

Esteban, supongo que esto será aplicable a nivel mundial. Es una desgracia, pero sólo somos una masa dirigida por los pocos que mueven los hilos desde las alturas.
Nuestro deber: ser críticos, en la medida de lo posible, e intentar beber de muchas fuentes. Si son fuentes que podemos tocar, mucho mejor.
Y sé que tú conoces mucho de estos mundillos.

Chaly, interesa tenernos atolondrados. Y también existe mucho mensaje malintencionado a nivel político. El cristo que se ha montado en España por ese examen que tienen que hacer los niños para conocer el nivel de conocimientos, por ejemplo, me parece increíble. Pero más increíble aún, es el hecho de que algunos padres y profesores se nieguen a cumplir su realización y no envíen al cole a sus hijos. En este mundo del "Todo vale" y "Cumplo una ley si me sale del nabo", ya estamos empezando a ver los frutos. ¿Qué ejemplo es éste para las generaciones jóvenes? ¿por qué no aplicamos los medios a disposición para cambiar las cosas y dejamos de hacer las cosas a las bravas? No sé... Da pánico pensarlo. PÁNICO.

Pedro, yo creo que sí estamos más formados por la exigencia de determinados conocimientos a cierto nivel. Pero sólo a cierto nivel. El problema también lo veo en la desmotivación de la gente, la falta de vocación en el puesto de trabajo. Incluso, en la vida personal.
Debo de estar haciéndome mayor porque veo mucha dejadez y carencia de valores en la sociedad que me rodea. En el camarero que me pone un café, en la dependienta de la tienda de ropa X, en el personal de banca (éste no me extraña)...
¿Que hay personas que lucen en medio de toda esta masa gris? Pues claro que sí. Si no...¿qué sería de nosotros?

¿Que tenemos un reto por delante? De eso no hay duda.

A ver qué nos deparan todos los cambios que se aproximan.
Yo, sinceramente, me siento triste al pensarlos.

Jota Ele dijo...

Pues.. sí, Campu. Tienes toda la razón.

Padres que se niegan a que sus hijos hagan un examen para comprobar su nivel de conocimientos, que se quejan que tienen unos deberes excesivos. Recuerdo cuando mi hija mayor me decía: ¡Ay, papá, la cantidad de deberes que tengo, me voy a morir". Y yo le contestaba que no he conocido un solo caso de un estudiante que haya muerto en acto de servicio. Mientras tanto, estamos en los últimos lugares de Europa en nivel de conocimientos, en capacidad lectora, etc. Aunque este es otro tema.

También tienes razón en lo de la RAE. El número de disparates que están incluyendo en nuestro diccionario es muy preocupante. Claro que, "si el pueblo habla así, hay que aceptarlo". Ello en vez de mejorar el nivel cultural. No tienes más que ver ciertos programas de televisión en los que, unos indocumentados que no se pueden representar ni a si mismos, resulta que son líderes de opinión.

Te propongo un simple juego. Fíjate en personajes de televisión, (locutores, presentadores, periodistas, políticos, etc.), que se les supone una cierta formación académica, la profusión con la que emplean el supuesto verbo "preveer". Este "verbo" me hizo ganar una cena a cierto personaje importante, cliente de mi despacho. Me pedía que había que "preveer" cierto asunto. Cuando le dije que ya estaba "preveido" el asunto, me contestó: "Será previsto". y le di la razón, no sin antes explicarle que si el participio era "previsto", el verbo sería PREVER. Pues, erre que erre, hasta que perdió la cena.

De todas formas, tengo que mirar si la RAE ha "preveido" incluir el verbo "preveer" en el diccionario. No vaya ser que...

Hasi que, vesos, Kanpurianha.

Total, ya da igual como escribamos.

Miguel García dijo...

En primer lugar deseo agradecerte tus palabras y sí, en efecto, parece que es una mala racha de la que espero poder salir pronto.

En cuanto al tema que tocas daría para mucho pero te resumo mi opinión diciendo que no hace falta creer en teorías conspiranoicas para darse cuenta de que a los poderes públicos no les interesa que la gente sea capaz de pensar por sí mismas. Es preciso idiotizar a las masas para que los siga sin plantearse tan siquiera qué es lo que siguen. Somos rebaño.

Un abrazo,

Campurriana dijo...

Miguel, la vida es una continua despedida (palabras copiadas de Risto y Risto de no sé quién). Difícil acostumbrarse...

Por cierto, hacemos muy bien de rebaño. Se lo ponemos tan fácil...

Campurriana dijo...

Jota Ele, no me había parado a pensar en ese verbo...preveeeeeeer
Interesante anotación.

¿Sabes cuántas personas con puestos cualificados dan patadas continuamente al diccionario y a la redacción?