18 de julio de 2017

Cerca del mar o deseándolo



Me basta, de momento, con el aroma a mar de los paseos cercanos. Me basta, de momento, con el roce de la brisa, de los instantes cerca de olas y desembocaduras. Como esta imagen, así recuerdo mi fin de semana en tierra de lujos.

Hoy es una tarde de julio nublada, aunque cálida, aquí por Galicia. Pienso retomar el blog, la escritura, la lectura tranquila. Pienso hacerlo porque lo echo de menos. Os echo de menos a vosotros; los observadores, los críticos, los que os detenéis para meditar. Para, simplemente, disfrutar de la luz, de la oscuridad, de sus juegos mutuos, silenciosos y tremendamente bellos.

Hacía tiempo que no pasaba una tarde en soledad como la de hoy. Comienzo a ser fructífera a eso de las diez. Soy nocturna. Disfruto de ese silencio de la noche interrumpido, de cuando en vez, por una cisterna o por un coche en busca de sexo fugaz. No olvidemos que, cuando un hombre hace gemir a su coche, pretende, más tarde, hacer gemir a una mujer.

Suerte a todos en esta tarde de julio. Pero, lo más importante, suerte a todas. No elijáis a los hombres que utilizan el coche para atraer hembras. Suelen tener algunos inconvenientes.

4 comentarios:

Matías dijo...

Somos muchos los que vivimos en tierras de secano y estamos deseando hacer una escapada al mar, en Galicia hay tiempo para todo en parte por la climatología.
Creo que el coche atraía a algunas mujeres en los años sesenta y setenta del siglo pasado, hoy quizás las atraigan con un yate o un avión privado.
Un abrazo.

VENTANA DE FOTO dijo...

Deseándolo bastante, con las temperaturas tan altas que estamos padeciendo en Córdoba. Por ahora me tenfo que conformar con verlo a través de las fotos que tengo en mis archivos, aunque seimpre que puedo procura hacer una escapadita a una ciudad marítima.

Me alegro de tu nueva aparición. Con lo que a mí respecta, aunque sigo publicando, tengo una cierta pereza que me provoca el calor.

Besos

esteban lob dijo...

¡Vaya Campurriana! No había meditado acerca de la posibilidad de que el gemido de un coche, conlleve esa intención posterior, pero me hace gracia.

Saludos australes.

Campurriana dijo...

Matías, cada vez somos más exigentes jajajaja
Respecto al mar, éste me da libertad, sosiego... Creo que lo necesito de verdad.

Ventana de Foto, Andalucía es preciosa. Estuve por allí hace unos años y me enamoró también su verano.
Voy apareciendo pero menos. Es cierto que el calor nos aleja de las escrituras largas. También, los Tuiters.

Esteban, yo siempre lo he pensado. Un hombre en un coche increíble seguro que tiene alguna carencia jajajajaja
;)