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Me ha gustado. Me ha entretenido y, además, el reparto es apetecible. También, el ambiente creado. Esos pueblos de Castilla, las casas, las familias, los rencores, los deseos, el amor, el desamor...
En la vida vamos guardando tantas vivencias... No somos conscientes de que las cargamos durante toda nuestra existencia, incluso cuando ya las creíamos olvidadas. Pero no. Ahí está nuestra eterna mochila; ésa que nos acompañará siempre. Y lo mejor es aprender a llevarla con gracia, con inteligencia, con relatividad... Todo, al final, tiene una relativa importancia.
Todas nuestras experiencias las llevamos guardadas en nuestra maleta y aunque las negativas las pretendemos borrar acuden de nuevo a nuestra memoria sin que nosotros podamos evitarlo.
ResponderEliminarBesos
No nos libramos de esas experiencias negativas que, a su vez, nos hacen más fuertes. O más desdichados...
ResponderEliminarNo sé de qué película hablas, Campurriana, pero no importa.En todo caso lo que pasa "en esos pueblos de Castilla" podría suceder en cualquier otro lugar del mundo. También acá.
ResponderEliminarUn beso austral.
Es una película que tuvo críticas dispares y que al final opté por no ver, pero veo que tendré que hacerlo.
ResponderEliminarGracias por la información.
Cada cual lleva su mochila de la mejor manera posible para no estropearse mucho la espalda.
Un abrazo.
Parece interesante, intentaré verla.
ResponderEliminarAbrazos.
La tengo para ver.
ResponderEliminar:)
Qué bien!!!
Te contesto a tu comentario que estás en lo cierto. Mi nombre es Antonia.
ResponderEliminarBesos
Dejo mis sensaciones escritas aquí. Los contenidos provocan tantas sensaciones como miradas hay. Y no sólo tenemos una mirada. Cada persona tiene infinitas miradas a lo largo de su vida... Y de sus dìas.
ResponderEliminarLeí el libro y por supuesto, veré la película. Considero que la literatura tiene sustento en la pluma de Auster.
ResponderEliminarSaludos desde un país del mundo, tal vez similar al que plantea la película.