Jejejeje
Por favor, escuchadla hasta el final. No tiene desperdicio.
:)
Yo soy gitano de Peret
30 de agosto de 2014
2 comentarios:
He tenido que habilitar de nuevo la moderación de comentarios. En este blog se admiten todo tipo de opiniones pero con argumentos y con respeto hacia las demás. El insulto y las malas formas no caben en este lugar. Si entras aquí con esas intenciones, no serás bienvenido.
Los anónimos han venido en forma de spam solamente, durante estos últimos meses. Me veo obligada, por lo tanto, a bloquearlos.
Siento que tenga que ser así.
Gracias.
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Yo también he nacido para amar, de hecho tengo mucho amor que dar, pero no me dejan.
ResponderEliminarNo tengo nada contra las razas, ni tampoco contra la sabiduría, cosa distinta es lo que se haga con esos conocimientos y como y para qué se usen.
La guerra guste o no, siempre ha sido un motor en el desarrollo humano desde el principio de los tiempos, vale, puede parecer una barbaridad, pero muchos inventos que hoy utilizamos en casa, como el microondas sin ir mas lejos tuvieron su origen en la segunda guerra mundial.
Ahora no tengo memoria ni ganas de buscarlos, lo haré otro día.
Besos
Ripley, me hizo gracia el punto de vista de los gitanos.
ResponderEliminarMejor no saber nada para no hacer nada malo...algo así decía...¿no?
Bueno, saber algo no implica necesariamente destruir.
Respecto a las guerras...vaya, preferiría estar sin microondas a estas alturas...
No creo que sean la solución de nuestros problemas, a pesar de que muchas veces de lo malo pueden salir cosas muy buenas o interesantes al menos.
En las guerras todos pierden aunque unos más que otros, es verdad.
Con las características que tiene el ser humano es difícil evitarlas. Imposible, diría yo...
Somos demasiado mezquinos.