27 de octubre de 2014

¡Qué susto! ¡Por un momento pensé que era Jorge Javier Vázquez!



Se parece al de la fotografía, ¿no?. Bueno, los más refinados preguntaréis que quién demonios es Jorge Javier. Supongo que nos haremos los locos y no diremos nada aquellos incultos que no tengamos duda de quién es este presentador que, sorprendentemente, sigue llenando espacio televisivo y por algo será. Una tristeza pensarlo detenidamente porque, si algún día tuvo gracia, hoy aburre hasta a las ovejas.

Bueno, para vuestra tranquilidad, no se trata de Jorge Javier Vázquez, sino de una nueva trama de corrupción política. Nada nuevo. Más y más corrupción en nuestro país que, increíblemente, aún se tiene en pie a pesar de las innumerables hostias recibidas cada día, cada instante. 

Nos van soltanto interesadamente esta información desinformada y, lo peor de todo ello, es que nos van acostumbrando a los circos patéticos, miserables, repugnantes. No lo comprendo. No puedo comprender cómo somos tan buenos, cómo seguimos siendo tan buenos. Es cierto que Rajoy tiene que pregonar nuestras cualidades por ahí por razones obvias pero llega un momento en el que, si nos ponemos en el lugar de un afectado directo por las Preferentes y leemos las noticias sobre los tests de estrés y lo maravillosa que es nuestra banca, buffff

Todo este espectáculo lamentable se podría resumir en la altivez insoportable de Blesa o en la sonrisa de un tal Rato, como insulto a una sociedad sufrida, dañada enormemente por la desconfianza brutal en unas instituciones que debieran ser el soporte de todo, de casi todo. Por decir dos nombres de los tropecientos, vaya...(Blesa y Rato, Rato y Blesa).

La noticia (por si os interesa este pedacito de desinformación soltada con intenciones, como todas las desinformaciones).

Por cierto, merece la pena ver la película Relatos salvajes. Viene a cuento...

7 comentarios:

marian dijo...

No ganamos para disgustos, Campurriana. ¿Cuándo acabará esta pesadilla?

Juan Nadie dijo...

No es fácil acabar con ella, porque llevamos siglos de picaresca (estamos en España, la patria de la picaresca), de modo que "paciencia y barajar". Acabará cuando quieran que acabe, ¿pero querrán?

Juan Nadie dijo...

Parece que algunos no quieren, que se me olvidaba añadirlo.

marian dijo...

No se acaba porque no se quiere, eso está a la vista, porque poder se puede, no es algo irrealizable. Siempre habrá alguien que busque la rendija donde meterse, pero es que estos últimos años no ha habido rendijas, ha habido puertas abiertas y "tonto el último".

Campurriana dijo...

Estas noticias tienen un claro interés. Alguien poderoso está detrás de ellas y supongo que no será único beneficiario "Podemos".

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Que caigan todos. Y que se vayan.

Campurriana dijo...

Pedro, ¿sabes lo más triste? Que la palabra TODOS tendría que incluir también a los pequeños corruptos. Los que nos rodean, los que nos tocan, los que no pueden robar más porque no pueden...
Buffff